De Tu Mano Hasta Soñar

Avanzo a tientas sin encender la luz del pasillo para no alterar tu sueño. Debes llevar unas horas durmiendo. La jornada se alargó pero al fin me encuentro en el lugar en el que llevaba deseando estar desde que atendí tu llamada diciéndome que ya estabas en casa y todo te había ido genial. Afuera está lloviendo pero parece que no lo hacía cuando decidiste acostarte; la ventana está abierta y algunas gotas de lluvia se cuelan queriendo ocupar mi lado de la cama. Cierro con sigilo para no despertarte. Y al darme la vuelta me quedo atontado observándote mientras duermes todavía con el teléfono en una mano por si llamaba y la otra acariciando mi parte de la almohada como si mi cara estuviese debajo de la yema de tus dedos. Me siento tan afortunado de tenerte ahí... Y a pesar de mi prudencia para no despertarte, mi perfume me delata justo en el momento en el que me acerco a darte un beso suave y tus ojos me descubren a un centímetro de tu boca. Con esa sonrisa no hace falta que me des más bienvenida. Me voy al baño a quitarme las horas de oficina impregnadas en la piel y al salir te encuentro de nuevo dormida. Ocupo mi lugar lentamente entre las sábanas y me aferro de tu mano hasta soñar. Y mientras espero al sueño me acuerdo de los días en que nos moríamos por poder disfrutar cada noche de la compañía del otro, juntos en nuestro propio hogar.

Y es que Sucede Que Hoy no me conformo con escribirlo...

2 comentarios :

Encarni | 13:21

Me encanta cuando escribes y consigues que yo me cuele en la escena, que observe como caminas por el pasillo, como cierras la ventana, como te duermes a su lado. Tus palabras tienen vida y eso es una de las cosas que las hacen geniales. El título de tu post podría ser perfectamente el de un libro ¿dispuesto a escribirlo?

Demasiado sin pasar por aquí, pero eso no significa que me haya ido lejos.

Mil besos.

Pablo Martín Lozano | 13:34

Hola Encarni, cuanto tiempo. Muchas gracias por dejar un comentario de nuevo y que además sea así.
Ojalá ese libro y otros tantos más vayan viendo la luz. Me encantaría y por intentarlo te aseguro que no será.
Me gusta eso de que mis palabras tienen vida, es todo un halago.

Gracias una vez más y un abrazo.