La Visita De Un Ángel

Creo en la belleza pura desde el momento en que te vi sentada con tu cámara de fotos entre las manos iluminando tu rostro con la luz que irradiaba la pantalla. Rodeada de gente y sola, tan infinitamente sola que a pesar del vocerío y los empujones creí compartir sólo contigo aquel lugar de ensueño. Más tarde descubrí que tus ojos y tu piel brillaban sin necesidad de la luz reflejada de tu cámara fotográfica. Era el aura que te rodeaba; la finura del ángel caído de un lienzo renacentista. Miré al cielo y observé un hueco entre las nubes que parecía conectar directamente con el paraíso en el que comencé a creer desde que te vi sentada y supe que belleza como la tuya no podía ser cosa de este mundo. Seguramente habías descendido como un rayo de luz hasta posarte en aquel banco de piedra ocre con la misma suavidad con la que luego ondearía tu vestido negro. Se reinventó la perfección aquella noche con tu presencia. Cuando mis ojos te perdían era como querer respirar estando bajo el mar azul y profundo que nos rodeaba. Como morir ahogado entre almohadones como los que te rodeaban la primera vez que mi mirada rondó tu figura y cayó irremediablemente en el embrujo de tu ombligo. Volvería hasta aquella noche una y mil más si tuviera la capacidad de controlar mis sueños. Viajaría hasta el momento en que te descubrí entre la gente y comenzaría a reescribir la historia. Pondría el modo "pause" a tu alrededor y me acercaría poco a poco hasta ocupar el lugar de tu lado, rozándonos piel con piel. Te cogería de la mano y te invitaría a escapar en busca de un rincón secreto para entregarnos al más intenso, loco y desenfrenado amor. Te coronaría reina de la noche y dueña eterna de mi devoción. Y emborracharía de champán y de tu desnudez hasta caer dormido con tu cabeza sobre mi pecho y las pieles intercambiando todo su calor.

Y es que Sucede Que Hoy recordé la visita de un ángel...

2 comentarios :

Ananda | 19:04

La pureza, espiritualmente hablando, es una bella inspiración que nos eleva el alma.
El leve aroma que desprende un ser cuando vive en armonía con la Luz es fuente de admiración y belleza; belleza etérica que que nos nutre de Luz, alimentando nuestro Ser y nuestro cuerpo.



Lo Angelical, la Luz, lo bello por ser precisamente, puro (espiritualmente hablando),existe para y por la Luz y, para inspirar los sentimientos y pensamientos más nobles.

Pensamientos, sentimientos que no son aprisionados por la carne y que lejos de llamarla, nos inspiran, en cambio, experiencias para el Alma.

Se puede sentir a otro ser sin tocarlo, sintiendo su Ser, sintiendo su alma, fusionándose con él, sin querer "poseerlo".


Los Ángeles nos invitan a subir cada vez más, a ir más allá de lo que lo material nos puede ofrecer.
Si queremos ofrecerles contacto físico,es que no hemos entendido su petición que lejos de ser material es de lo más sutil y puro... Es LUZ...Y nos llaman a vivenciarla..


Un abrazo Pablo:

¡ Que los más bellos sentimientos, aquellos que no aprisionan al ser, inspiren tu alma elevando tu Ser!


Luz Wilson.

Pablo Martín Lozano | 19:07

Mil gracias una vez más Luz por tus enseñanzas...ya no son ni comentarios...son pequeños regalos en forma de letras que nos haces de manera altruista. Gracias de corazón.
Sabias palabras. Que sea la luz!

Un fuerte abrazo.